¿Qué significa a ojo de buen cubero?

A ojo de buen cubero es como hacemos una aproximación o cálculo estimado o una medición sin ayudas, simplemente basándonos en nuestra experiencia más que en cálculos exactos.
Expresiones similares: a ojo, tanteando, por la cuenta de la vieja,…
Ejemplos
—A ojo de buen cubero, creo que no va a caber el mueble en esta habitación.
—Échale sal a ojo de buen cubero, pero sin pasarte.
—Todavía nos deben quedar, a ojo de buen cubero, unos 300 metros para llegar.
—A ojo de buen cubero, debía haber unas 50 personas en la fiesta.
Origen de la expresión

Cuba, según el diccionario de la RAE, viene del latín cupa, y es un recipiente de madera, también actualmente de chapa metálica, que sirve para contener agua, vino, aceite u otros líquidos, y está compuesto de duelas unidas y aseguradas con aros de hierro, madera, etc., y cerradas con tablas por los extremos.
La cuba es lo que conocemos como tonel, barril, tina, tanque, cubeta… Y el cubero es la persona que vende o fabrica cubas (tonelero, barrilero, carralero…).
Las cubas se cierran de manera hermética y antiguamente tenían un gran trabajo artesanal detrás, elaborando el cubero listón de madera tras listón, calentándolos para curvarlos, encajándolos, y todo esto sin haber medidas o capacidades estandarizadas para las cubas.
Dicho esto, los cuberos dependían de su experiencia y «buen ojo» para darles la forma y el tamaño adecuados. Medían volúmenes sin instrumentos precisos, ajustaban las piezas de madera al milímetro y calculaban las capacidades solo mirando el recipiente.
Por todo ello, un buen cubero tenía la capacidad de estimar con gran precisión sin ayuda de instrumentos de medición. Eso era tener ojo, y por tal motivo, su destreza para calcular se volvió tan reconocida que su fama dio lugar a la expresión.