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Ir al grano

Qué significa "ir al grano"

Ir al grano, según el diccionario de la RAE, es una locución (conjunto de palabras que forman una unidad léxica) coloquial usada para manifestar o reclamar la necesidad de ir sin rodeos a lo fundamental de un asunto.

Esta expresión significa decir las cosas de forma directa y concisa, sin rodeos ni explicaciones innecesarias. Es ir directamente al punto central de una conversación o asunto.

Ejemplos:

—Deja de dar rodeos porque no te estoy entendiendo, ve directo al grano.
—No vamos a estar perdiendo el tiempo con esto, vamos al grano.
—Durante la presentación, fui al grano y me centré en los puntos clave del proyecto.

Origen de la expresión

ir al grano

Grano viene del latín granum y significa semilla, fruto o cereal. La expresión proviene de la agricultura: en el proceso de trillar el grano, se separa la parte útil (el grano) de la paja.

Por lo tanto, “ir al grano” implica dejar de lado lo que no es esencial y centrarse en lo importante, como separar el grano de la paja.

Por otra parte, del grano o semilla sale el brote que da lugar a una planta, por ende, el grano es el origen de donde sale lo demás (raíces, tallo, hojas…), luego ir al grano es ir al origen, a lo principal, a lo básico y fundamental.

ir al grano

El trigo ha sido base de nuestra alimentación en nuestra región desde hace 5000-7000 años, y siempre ha tenido una importancia económica debido a su comercio y a su cultivo extensivo.

En cuanto a simbolismo y cultura, el trigo ha sido asociado con la fertilidad y la abundancia. En la religión cristiana, por ejemplo, el pan y el vino representan el cuerpo y la sangre de Cristo.

En literatura y arte, ha sido utilizado como metáfora en numerosas obras literarias y artísticas, representando conceptos como la vida, la abundancia y la prosperidad, y ha moldeado el paisaje y las tradiciones rurales de España.

En conclusión, el trigo, que tanto está ligado también a nuestra agricultura y cultura a través de expresiones que guardan relación con este, como limpio de polvo y paja, o no es trigo limpio… nos recuerda la necesidad de buscar la verdad y la autenticidad.

Al igual que el investigador separa los hechos de las opiniones, debemos esforzarnos por ir al grano y descubrir lo que realmente importa.