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Tomar el pelo

¿Qué significa tomar el pelo?

Tomar el pelo es una expresión coloquial que significa engañar o burlarse de alguien. En algunas ocasiones es de manera amistosa o en tono de juego, de broma, sin intenciones maliciosas, tratando de hacer creer algo de manera divertida; en otras, puede tratarse de una mentira, hacer creer de algo falso que es cierto, abusando de la confianza o de la ingenuidad.

Según la biblioteca fraseológica del Centro Virtual Cervantes, dejarse tomar el pelo significa ser demasiado condescendiente o tolerante con alguien (—Te estás dejando tomar el pelo por tu hija).

Viene a ser un sinónimo de vacilar, engañar, cachondearse, pitorrearse, mofarse, meterla doblada, etc. Podemos distinguir si es en broma u ofensivo, según el tono.

Ejemplos:

— Es broma, no me hagas caso, te estoy tomando el pelo.
— Esto parece una tomadura de pelo, ya es la tercera vez que llamo, me dicen que está solucionado y sigo con el mismo problema. 
— Te han tomado el pelo, este cuadro no vale lo que has pagado.
— Me encanta cómo me toma el pelo, siempre me hace reír, es muy ingeniosa.

Origen de la expresión

tomar el pelo

En algunos países de habla latina como Colombia, Nicaragua y Paraguay, dicen tomar del pelo, por lo que el origen de esta expresión podría venir de hace mucho tiempo atrás.

Existen varias teorías sobre el origen de esta expresión. Una de ellas se basa en el corte de pelo que se les hacía a los presos y militares por razones higiénicas y disciplinarias en cárceles y cuarteles y era considerada como burla.

Otra de las teorías señala las barbas que se llevaban en épocas del Imperio romano o en la Edad Media, cuando tocar una de estas sin consentimiento era motivo de ofensa y podía terminar fácilmente en una pelea o duelo.

En conclusión, tomar el pelo a alguien puede ser sinónimo de burla o de ofensa, ya que en tiempos pasados tomar del pelo de la barba de alguien podía considerarse una ofensa grave o una simple broma, dependiendo del contexto.

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